Es probable que en tu experiencia en campamentos has tenido que tomar la decisión de regresar camperos a casa. Debido a su mal comportamiento, o ha una enfermedad que requiere atención profesional.
Hoy deseo compartir contigo algunas, situaciones que ameritan el regreso de un campero a casa:
- Accidente o enfermedad: fracturas, golpes en la vista, oído, olfato, quemaduras de segundo o tercer grado, cortadas profundas, enfermedades que ameritan medicamentos constantes o guardar reposo en casa. Son algunos de los factores que pueden ayudarte a tomar la decisión de regresar a un campero a casa.Esto con el objetivo de que el o ella pueda tener un mejor cuidado, por profesionales en centros asistenciales, o por su familia.
- Enfermedades psicológicas o psiquiátricas: existen enfermedades psicológicas extremas que necesitan de un cuidado o terapias constantes por psicólogos que regularmente no se encuentran en los campamentos (ya que la mayoría de veces no están dentro de los propósitos del mismo).En ese sentido, enfermedades como la esquizofrenia, bipolaridad, autismo, entre otras. Pueden ser un factor determinante para hacer que un chico o chica regrese a casa. Esto debido a que dichas enfermedades podrían ser difícil de manejar para la persona que la padece, y para todas aquellas personas que interactúan con ella.
- Alcoholismo y drogadicción: La adición es el principal problema del alcoholismo y la drogadicción. Por eso, si en tu campamento asisten varias jóvenes o adolescentes que tienen luchas con este tipo de adiciones. Entonces, deberá tener mucho cuidado. Pues esto podría hacer que tu campamento se torne difícil. Y que tengas que regresar a casa a uno o varios chicos y chicas.Recuerda, problemas como estos necesitan ser tratados en centros de rehabilitación con medicamentos y cuidados especiales.
Ahora, no estoy desestimando la obra del Espíritu de Dios. Ni los milagros que Él puede hacer en la vida de las personas. Simplemente propongo que seas muy cuidadoso (o cuidadosa) cuando te encuentres con situaciones como estas en tu campamento.
Recuerda, un psicólogo o un doctor cristiano podría ser de gran ayuda para evangelizar y restauración a personas con estos tipos de problemas.
[note note_color=»#fef0b4″]Este artículo fue una colaboración de Emilio Herrera.
Quien es consejero juvenil, tallerista y líder de jóvenes. Desarrollando el trabajo pastoral con jovenes y estudio en SETECA.[/note]